Tortosa una ciudad encantadora, en mi opinión uno de los pueblos más bonitos de la provincia de Tarragona. Tortosa tiene el encanto de los pueblos con historia. Pero no una historia cualquiera. Historia de las culturas, cristiana, judía y musulmana. Restos romanos e iberos. Sus calles y edificios están repletos de historia con edificios modernistas, que reflejan el esplendor de una burguesía incipiente. Con su castillo de la Zuda, convertido hoy en día en parador nacional. Las vistas desde el castillo, son inmejorables. Se dice que desde aquí, planeo Jaime I la conquista de pueblos tan importantes como Morella o Castellfort, que abrieron el camino a la conquista de Valencia. El castillo está situado en lo que fue una acrópolis romana. Los romanos pueblo sabio, siempre buscaban los mejores lugares en los que asentarse. Un monumento que no hay que olvidar y de obligada visita es su Catedral consagrada a la Virgen de la Cinta, de mucha devoción. El retablo policromado en su interior es de una gran belleza. En su interior se conserva una pila bautismal que regalo a la catedral el Papa Benedicto XVIII, el Papa Luna de Peñascosa (Castellón). Pila bautismal en la que fue bautizado el citado Papa. En la Iglesia Convento de la Purísima Concepción se conserva un Cristo de gran devoción en la localidad con fama de milagroso, cuya faz a poco que uno se fije aun con el dolor reflejado en su semblante parece que esboza una media sonrisa. Tallado en Italia en 1635 por el escultor Humile de Petralia. El rio Ebro a su paso por Tortosa brilla por sí mismo con gran majestuosidad. De todos los puentes que tiene Tortosa para cruzar el rio Ebro, el que más me gusta el Puente del Estado construido en 1942. Es un puente de una magnifica de gran elegancia. Para acabar una curiosidad el Ebro a su paso por Tortosa también se ha helado, hay una fotografía del Ebro helado en Tortosa del año 1891. Tortosa una ciudad muy bonita, de obligada visita.
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