Castillo de Corbo (Benasal)

Castillo es citado en diversos documentos a partir de 1157 en el que Ramón Berenguer IV concede carta-puebla de Alcañíz. Pedro II lo conquistó a los musulmanes en el 1210 y en 1229 debió estar en poder de Jaime I, ya que consta un acuerdo por el que pasa a ser propiedad de Abú Zayd, penúltimo gobernador árabe de Valencia y aliado del rey cristiano. También consta en documentos que en 1231 sirvió de garantía de un préstamo contraído por el Rey Jaime I, de donde se deduce que en esas fechas estaba otra vez bajo su dominio. En la Carta Puebla de 1239 consta que Pedro Daroca quedó feudatario en el macizo sobre el castillo de Corbó. Estuvo integrado en la demarcación territorial del Castillo de Culla. En 1303 el Temple compra al endeudado Guillem de Anglesola el castillo de Culla y sus territorios entre los que se encontraba el castillo de Corbó. Pero en 1307 el temple perseguido por Jaime II se rinde en diciembre en Adzaneta, Albocacer, Ares, Benasal, Boi, Cuevas de Vinromá, Corbó, Culla, Chivert, La Iglesuela y otros. El castillo pasa a ser propiedad de Montesa en 1319. Hay constancia de la existencia de guarnición y alcaide en 1321, cuando Jaime II hace mención de los desmanes contra ellos de parte de los habitantes de Morella. Quedó despoblado en 1612. La población de Benasal se encuentra en la provincia de Castellón, en una región montañosa, el Alto Maestrazgo, delimitada por el río Montlleó y la rambla Carbonera. El castillo se ubica sobre un peñasco a 1060 metros de altitud, al noroeste de la población, a la derecha del Km. 10 de la carretera a Vilafranca, sobre el nacimiento del barranco de Enramos. El castillo fue levantado sobre un asentamiento del Bronce que fue ocupado posteriormente en las épocas ibérica y en la romana. A su pies existió un poblado musulmán. Es de tipo roquero, con un solo recinto murado de torres barbacanas gemelas de planta cuadrada y torre mayor con aljibe. Su muralla, de la que se aprecian muy pocos vestigios, debió ser de reducidas dimensiones, ya que su ubicación hacía necesaria su construcción. Es accesible por el su, a través de una pendiente muy pronunciada, y por el norte, donde está la entrada. Según la leyenda popular el castillo dispone de una comunicación subterránea con la cueva situada a los pies de la montaña desde donde brota una fuente y así mismo se cuenta que oculta grandes tesoros. (C.Pérez-Olagüe). Fuente Bic Generalitat Valenciana.
Este Castillo fue alzado sobre un asentamiento del Bronce, que fue ocupado posteriormente en las épocas ibéricas y romanas. A sus pies existió un poblado musulmán. Desde el siglo XII se tiene constancia de su presencia. Es de tipo roquero, con un solo recinto amurallado de torres barbacanas mellizas de planta cuadrangular y torre mayor con aljibe. Su muralla con muy pocos vestigios debió de ser de reducidas dimensiones, ya que la ubicación no hacía necesaria la construcción. Es accesible por el sur, mediante una pendiente muy pronunciada y por el norte donde se encuentra la entrada. Fuente Ayuntamiento Benasal. Su acceso mejor se encuentra en el km-10 de la carretera entre Benasal-Villafranca.